Se levanta el día en casa de Pasqualina, pero hoy no ha empezado muy bien…
Pasqualina es un pequeño murciélago, tiene tres años y tiene que ir a la escuela; como todo el mundo, dicen los padres.
¡Pero no quiere ir de ninguna manera, ni soñarlo! Y grita tan fuerte que los padres se encogen y se hacen pequeños, pequeños, tanto, que se les puede poner debajo del ala.
Y ahora sí que se va a la escuela.