El doctor le da la vuelta al reloj de arena. A partir de entonces, los lunáticos no pueden hablar, sino que, sentados a la mesa, se hacen gestos (siempre por encima de la mesa) para que los demás sepan en qué consiste su locura. Pero ¡ojo! El doctor, que además puede levantarse, los vigila.
Una vez transcurrido el tiempo, cada jugador da la vuelta a las cartas que se le colocan frente a él y se cuentan los puntos. ¿Quién ganará: los locos o el médico?
Incluye:
120 cartas
1 tablero circular
1 par de gafas
1 reloj de arena